Aunque no os lo creáis, el aprendizaje también es una ciencia. Y os preguntareis “¿qué quieres decir con eso?”. Pues básicamente, que existen una serie de técnicas para aprender de las que su eficacia está científicamente probada.

Si quieres de qué técnicas se tratan sigue leyendo.

Nuestro cerebro posee una gran capacidad llamada neuroplasticidad, gracias a la que estamos en constante aprendizaje, cambios y adaptaciones. Esta capacidad es algo que puede entrenarse y mejorarse, de esta manera podremos llegar a incorporar más información, así como a retenerla mejor.

Estas son las técnicas que mejor funcionan según la ciencia para conseguirlo:

Ensayo-error

De hecho, es la técnica de aprendizaje más extendida y natural. Un niño pequeño que no conoce el peligro ante el fuego, lo toca y se quema, a partir de ese momento ya ha aprendido que el fuego puede hacer daño.

Si extrapolamos esto al ámbito del estudio, es bastante importante que realices simulacros de examen, exámenes de otros años, te hagas una lista de preguntas e intentes responderlas, etc.

Algo que también es importante, pero poca gente lo hace, es acudir a la revisión de los exámenes, no solo cuando hemos suspendido para intentar subir nota, es interesante que lo hagamos para ver dónde hemos cometido errores y poder subsanarlos en próximas ocasiones.

Prueba con nuevas técnicas

Esto también está en línea con lo anterior. Si usamos siempre las mismas técnicas a la hora de estudiar nuestro cerebro se acaba acostumbrando y “se esfuerza menos”. Un ejemplo muy útil para explicar esto: si cogemos el coche para ir a la oficina y siempre hacemos el mismo trayecto, parece que finalmente lo hacemos por inercia, sin embargo, si probamos un día a ir por un camino nuevo, seguro que estás más atento y tratas de poner los cinco sentidos para recordar el camino y no perder detalles para futuras ocasiones.

Pues cuando estudiamos pasa exactamente lo mismo, tenemos que dar nuevos estímulos al cerebro para que esté en constante alerta.

Nada de atracones de estudio

Está comprobado que un cerebro saturado de información retiene mucho menos que unos descansado y “fresco”. Darte un atracón de estudio los días antes de los exámenes lo único que hará es sobrecargar tu cerebro, cansándolo, de manera que finalmente no retengas casi nada de lo que pretendías estudiar.

Es mejor que organices bien tu tiempo de estudio. Es más eficaz y eficiente que estudies una hora cada día, a que lo hagas siete horas en un solo día.

Es por esta razón por la que el descanso es algo primordial para la vida de un estudiante.

Estudia con “los 5 sentidos”

Es lo que se conoce como aprendizaje multisensorial. Ceñirse a estudiar tan solo “leyendo” está “pasado de moda”. ¿Has probado a estudiar asociando imágenes a conceptos que tienes que estudiar?, échale un vistazo a nuestra entrada sobre FLASHCARDS, ya verás que gran descubrimiento.

Prueba a escuchar podcasts relacionados con el contenido que tengas que estudiar, verás como retienes mejor la información que en el caso de si la hubieras tan solo leído.

Es curioso que hasta un olor en particular puede hacernos recordar algo en concreto. Prueba un día a perfumar tu habitación con un aroma que te guste mientras estudias. Momento antes del examen, prueba a perfumarte a ti mismo con ese aroma que usaste. Te sorprenderá cómo tu cerebro ha asociado ese olor con el conocimiento que tenías que retener. La ciencia dice que los mejores aromas para estudiar son los cítricos. (limón, naranja, mandarina, etc.)

Cuéntaselo a tus padres o amigos

Está comprobado que cuando nos paramos a contarle a alguien lo que hemos estudiado, lo afianzamos mejor. Además, si no tenemos dificultades a la hora de explicarlo es señal de que nuestro estudio está teniendo frutos.

No es necesario tampoco que “torturemos” a los nuestros para que “nos pasen la lección” todos los días, puedes hacerlo con tus propios compañeros de clase, será beneficioso tanto para el que cuenta como para el que escucha.

A modo de resumen, ya lo decía Einstein con alguna de sus frases más conocidas:

• “Lo importante es no dejar de hacerse preguntas”
• “No entiendes realmente algo a menos que seas capaz de explicárselo a tu abuela”
• “Una persona que nunca ha cometido un error nunca intenta nada nuevo”
• “Una locura es hacer la misma cosa una y otra vez esperando obtener resultados diferentes. Si buscas resultados distintos, no hagas siempre lo mismo”

Esperamos que estas frases os hagan reflexionar y sigáis sacando el máximo partido posible a vuestro estudio. ¡Mucho ánimo!